Archivo de la categoría: Infancia
12 se febrero: Día Internacional contra el uso de Niños Soldado
Tomado de Ecured
El Día Internacional contra el uso de Niños Soldado se conmemora el 12 de febrero para recordar a los niños que cada día son reclutados para participar en conflictos armados. El reclutamiento de menores de edad se reportó en 20 de las situaciones cubiertas por Naciones Unidas y en 61 de las 63 partes implicados en enfrentamientos armados se registró esa violación.
Esta fecha, 12 de febrero, también marca el aniversario de la adopción de un protocolo sobre la participación de los niños en los conflictos armados, que establece la edad mínima para el reclutamiento en las fuerzas armadas a los 18 años y ha sido ratificado por 167 Estados.
Vacunación en edades pediátricas: tradición, confianza y amor
Por Liz Armas Pedraza, publicado en Cubahora
Era 1962, arrancaba en Cuba la campaña de vacunación contra la poliomielitis para controlar la incidencia de la enfermedad en el país e inmunizar a más de 2,6 millones de niños menores de 15 años. El resultado: la eliminación de la enfermedad apenas cuatro meses después de iniciada la vacunación. Así nacía el Programa Nacional de Inmunización (PNI).
En la actualidad, el país produce casi el 80% de las vacunas que consume dicho Programa. Y es que Cuba cuenta con una amplia tradición en el desarrollo de vacunas. Por solo mencionar algunos hitos, hace más de 25 años el país produce la vacuna preventiva recombinante contra la Hepatitis B, Heberbiovac HB, que produce el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB), del grupo empresarial BioCubaFarma.
También se inmunizó la población infantil con la vacuna cubana contra el agente bacteriano Haemophilus influenzae, causante de meningitis y neumonías en los primeros años de vida. Mientras tanto, se desarrolló CIMAvax EGF, una vacuna terapéutica contra el cáncer enteramente creada en Cuba y licenciada en el país para su uso en pacientes adultos con cáncer de pulmón de células no pequeñas en etapas IIIB/IV.
Latinoamérica, trabajo infantil y neoliberalismo
Por Hedelberto López Blanch, publicado en Rebelión
La pandemia de covid-19 ha destapado con fuerza que las verdaderas causas por las que sobrevive gran parte de la población latinoamericana se debe fundamentalmente a los sistemas capitalistas neoliberales instaurados en la región.
Responsables directos son los regímenes derechistas, muchas veces encabezados por millonarios o por políticos dirigidos desde Washington, que acatan todas las leyes de controles financieros y económicos impulsadas por el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM).
Uno de los sectores sociales que ha sido más golpeado por la crisis económica mundial y las políticas de globalización neoliberal y de privatizaciones que tomaron auge en los últimos años ha sido el de la niñez.
Mensajes de Fidel Castro a la niñez, a propósito del Día Internacional de los Niños y las Niñas
En el acto de apertura del Primer Congreso Nacional de maestros rurales, el 27 de agosto de 1959:
“Que podamos decirles al pueblo y al mundo, que como un esfuerzo más de nuestra Revolución, como un esfuerzo más de nuestro pueblo, no quedará un solo niño sin escuela y esto significa el desarrollo de la inteligencia de todos nuestros niños. Eso significa que no quedará un solo talento que no se abra a la luz. Eso significa que no quedará una sola inteligencia sin su oportunidad, ni quedará un solo maestro sin su vocación. Significa la concreción de los intereses, de todos los intereses de la nación, del maestro y del niño con un poco de sacrificio hoy, con una compensación futura en lo económico, pero sobre todo algo que no se logra con todo el oro del mundo, la satisfacción de haber servido a su patria en esta hora”.
Trabajo infantil: más pobreza a futuro
Por Marcelo Colussi, publicado en Alainet
Pobreza y riqueza
“¡Los niños primero!” suele decirse. Y durante la artificialmente manipulada guerra de Irán-Irak, entre 1980 y 1988, en que se desangraron en forma inútil ambos países (favoreciendo solo a las potencias capitalistas, que se cansaron de venderles armamentos), esa consigna se cumplió en forma literal: eran niños los que iban primero, al frente… para detectar las minas –¡pisándolas!–. Este patético ejemplo muestra lo que, en buena medida, sigue siendo la actitud del mundo adulto con respecto a la niñez: no siempre se la comprende como la preconizada “semilla del futuro”, más allá que pueda declamárselo levantándose ampulosos discursos en su nombre.
Los hijos de la violencia: 9 de agosto día Internacional de los Crímenes Estadounidenses contra la Humanidad.
Por Fernando Buen Abad Domínguez, publicado en Rebelión
¿Hay un plan para encubrir los crímenes contra la Humanidad? Sí, se llama Capitalismo.
Quedarse quieto es hacerse cómplice. Ésta no es una denuncia cómoda para tranquilizar conciencias pequeño-burguesas. Es denuncia y es autocrítica. Mientras Trump y sus jaurías criminales reprimen, humillan y encarcelan a familias de “inmigrantes”; todos los Crímenes Estadounidenses se coagulan en las injusticias fronterizas, la inmensa mayoría de nosotros aporta su cuota de ignorancia, indolencia e inutilidad funcionales. Algunos claman a cielo y oran, otros se subliman mentando madres, algunos hacen donativos, limosnas y gestos compungidos. Otros más, alzan los hombros y siguen viendo sus noticiero favorito.
La única solidaridad concreta ocurre desde abajo, de la mano del pueblo que mira en el que sufre sus propios sufrimientos. Para no importunar al magnate de La Casa Blanca, cientos de funcionarios se cosen la boca con hilos de burocracia y silencian lo que les queda de consciencia para que el horror no les quite el sueño. Algunos abogados fabricaron trincheras de “jurisprudencia” a prueba de toda vergüenza, desde ahí pontifican deyecciones leguleyas expelidas por el “Estado de derecho” y los “tratados internacionales”.
Se exhiben muy pulcros para el tecnicismo y muy puntuales para la cobranza. Van y vienen de congreso en congreso, de conferencia en conferencia, de burocracia en burocracia… mientras los niños aprenden, tras las rejas, que viven en un mundo donde ser pobre se castiga, no importa de dónde vengas ni qué edad tengas. Castigo inclemente sin delito, sin juicio sin defensa. “La única forma de salvar la vida de las personas detenidas es su liberación”, dice el periodista Jacob Soboroff, que ingresó a estas cárceles del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) donde, ya en 2008, vio niñas y niños encerrados en jaulas. Soboroff lo relata en su nuevo libro “Separated: Inside an American Tragedy” (Separados: una tragedia estadounidense).
Feliz día internacional de la infancia para los pequeños y pequeñas cubanos, salvadoreños y del mundo entero
Por Brenda Murillo
Les regalo esta bella canción a todos los niños y niñas del mundo en este día Internacional de la Infancia. Esta celebración fue instituida por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 1956, consagrado a la fraternidad y a la comprensión entre los niños y las niñas del mundo entero. Para ese día, la ONU acordó que cada país debería promover actividades que involucrasen de manera directa a los más pequeños de cada casa.
El objetivo principal de celebrar este día es recordar a la ciudadanía que los niños son el colectivo más vulnerable y por tanto que más sufre las crisis y los problemas del mundo. Recordar que todos los niños tienen derecho a la salud, la educación y la protección, independientemente del lugar del mundo en el que haya nacido.
Dedicar un día internacional a la infancia también sirve para hacer un llamado sobre las necesidades de los más pequeños y para reconocer la labor de las personas que cada día trabajan para que los niños y niñas tengan un futuro mejor.
Una felicitación especial para los niños cubanos, cuyo crecimiento y desarrollo es prioridad del estado cubano, bajo la enseñanza martiana que expresa que «los niños son la esperanza del mundo»
La infancia y el sedentarismo tecnológico
La vieja afirmación “los tiempos cambian” se ve hoy tan real en cada aspecto de la vida cotidiana que muchas veces la pasamos por alto, pues ya constituyen algo normal en nuestro día a día.
Aplicable en todas las esferas de la sociedad, dicha sentencia constituye en pleno siglo XXI una verdad absoluta, si el tema a debatir es la infancia, la adolescencia y las nuevas tecnologías.
Salir a la calle y prácticamente no ver a ningún niño o joven jugar al fútbol o a la pelota, discutir en un partido de bolas en un parque o corretear en las aceras como protagonistas del viejo juego del policía y el ladrón, resulta una realidad cuanto menos alarmante.
Y es que “los tiempos cambian” y con la nueva era las tecnologías se han apoderado hasta de las antiguas tradiciones infantiles, lo cual, por desgracia, pasa muchas veces inadvertido para la mayoría de las familias.