El programador, periodista y activista de Internet australiano, fundador del sitio web WikiLeaks, permanece confinado en la cárcel de alta seguridad de Belmarsh, Londres, desde el mes de abril, cuando que Ecuador le retiró el asilo, y lo entregó a la justicia británica.
Aunque Assange es elegible desde septiembre pasado para salir en libertad condicional, la justicia determinó que el periodista debe esperar en prisión la decisión sobre la solicitud de extradición presentada por Estados Unidos, donde arriesgaría una condena de 175 años por ‘espionaje’.
El texto de La Red de Intelectuales, emitido el pasado 17 de diciembre, exige el respeto al debido proceso, la no extradición y la liberación inmediata, atendiendo también al delicado estado de salud que presenta.